Muchas imágenes tienen una función educativa. Conocer su lenguaje ayuda a maestros y alumnos a comprender sus mensajes con una actitud crítica y ofrece la posibilidad de usarlas desde dos perspectivas: la de educar con ellas y la de convertirlas en un campo de análisis y reflexión.
A través de las imágenes, los seres humanos somos capaces de expresar sentimientos, al tiempo que disfrutamos de ellas con nuestra sensibilidad estética. En todas las culturas la imagen está unida al arte como una manifestación de la creatividad humana a lo largo del tiempo y conforme las técnicas avanzan, se enriquecen sus posibilidades expresivas.
Las imágenes nos ofrecen una gama infinita de posibilidades didácticas y enriquecedoras, pero conllevan una trampa implícita si las usamos sin reflexión, sin una toma de conciencia de quién es el alumno, esto implica conocer, a grandes rasgos, su sensibilidad, mediaciones culturales y personales y, sobre todo, su manera personal de mirar.
Se considera que la utilización de recursos visuales y auditivas debe ser abordada desde el enfoque pedagógico de la Educación para los Medios, que integra los medios de comunicación e informáticos en la escuela desde dos perspectivas complementarias entre sí:
• La pedagogía con imágenes, utilizándolas como una herramienta de apoyo a la enseñanza y al aprendizaje, siendo el vehículo mediante el cual se enseñen los contenidos del currículo.
• La pedagogía de las imágenes, ofreciendo la enseñanza de los lenguajes audiovisuales que las caracterizan, poniendo al alcance del ciudadano común su producción y recepción.
Ambas perspectivas permitirán no sólo modernizar la educación integrando las nuevas tecnologías, sino lograr la parte más importante de todo proceso educativo: la formación de individuos pensantes que desarrollen sus habilidades de ejercer la crítica y sean capaces de ofrecer sus propias respuestas y soluciones a los problemas sociales que los afligen.
La sociedad actual está protagonizada por la imagen.
Existen centros de documentación hoy en día que cuentan con una importante suma de documentos gráficos, fotografías e imágenes fijas que constituyen un significativo elemento de la historia contemporánea y del nuevo mundo de la comunicación visual, podríamos hablar, como dice E. Méndez de una civilización de la imagen con un nuevo lenguaje de la imagen.
Existen centros de documentación hoy en día que cuentan con una importante suma de documentos gráficos, fotografías e imágenes fijas que constituyen un significativo elemento de la historia contemporánea y del nuevo mundo de la comunicación visual, podríamos hablar, como dice E. Méndez de una civilización de la imagen con un nuevo lenguaje de la imagen.
En la sociedad de la comunicación, Regouby señala la gran cantidad de audiovisuales, la telemática e informática, la internacionalización de los mercados, los intercambios de información más complejos y rápidos nos llevan a profundas transformaciones donde la comunicación y el poder comunicativo de la imagen pasan a ser algo fundamental.
Dentro de todo este contexto podemos analizar cómo estamos percibiendo las imágenes de nuestro tiempo. El proceso de percepción es un proceso estructurante; el cosmos no está estructurado en sí mismo, es el ojo humano lo que lo estructura, lo organiza y le impone un orden y un sentido al percibirlo, forma y contexto – figura y fondo-. En el mundo de la imagen se presenta un contexto determinado y es modelado por ese contexto.
Nuestros pensamientos influyen en lo que vemos y viceversa podemos decir que hay una reciprocidad intrínseca entre lo que aprendemos y lo que hacemos o lo que percibimos del entorno y lo que hacemos sobre él.
El análisis de contenido de documentos gráficos está fuertemente influido por el poder que tienen las imágenes de constituirse en verdaderos símbolos conceptuales de nuestra realidad. La relación que la imagen tiene con el texto es fundamental para el buen entendimiento de ésta y se convierte en una relación relevante, puesto que además de ofrecer datos concretos sobre lo que la imagen representa, es un factor condicionante esencial de su significado. El texto informativo que acompaña una imagen puede cambiar de forma radical su significado.
El uso educativo de la imagen en la escuela de hoy
Entre los educadores se pueden identificar diversas actitudes ante el uso de la imagen:
• Los que utilizan la imagen como decoración, concibiéndola únicamente para ilustrar un texto.
• Los que, entusiasmados ante las nuevas tecnologías, recargan sus materiales en una proliferación indiscriminada.
• Los que la utilizan como elemento educativo, contemplando el contenido y el mensaje estético que tienen y reflexionando sobre los significados que entraña la amalgama de fondo y forma.
Las posibilidades didácticas de las imágenes se ven enriquecidas por los medios y las nuevas tecnologías no sólo por las riquezas expresivas que encierran, sino porque son herramientas que, en manos de maestros y alumnos, son cauces de creatividad. Por eso su utilización debe hacerse tomando en cuenta:
- La pertinencia de combinar texto e imagen, ya que la unión de ambos puede ofrecer no uno sino varios significados.
- Definir claramente cuál es la función que las imágenes cumplen en ese tema, para lograr un aprendizaje significativo.
- Pensar en la idiosincrasia de los posibles usuarios del material, respetando sus mediaciones personales, familiares, culturales, tecnológicas e institucionales.
- La cultura audiovisual que poseen maestros y alumnos para integrar los lenguajes y que las imágenes sean un medio de reflexión y verdadera formación.
5. Evitar la utilización de imágenes que conlleven estereotipos no deseados y mensajes contrarios a los valores que se quieren promover
Alfabetizar audiovisualmente a las nuevas generaciones significa ofrecerles la oportunidad de ser receptores con mayores habilidades críticas de los mensajes mediáticos y que puedan utilizar los lenguajes como un medio creativo, enfrentando el mundo de imágenes reales y digitales que son y serán la tónica del futuro.
Alfabetizar audiovisualmente a las nuevas generaciones significa ofrecerles la oportunidad de ser receptores con mayores habilidades críticas de los mensajes mediáticos y que puedan utilizar los lenguajes como un medio creativo, enfrentando el mundo de imágenes reales y digitales que son y serán la tónica del futuro.
Utilizando pedagógicamente las imágenes que los medios y las nuevas tecnologías ofrecen a la educación, se encuentra la oportunidad de preparar “profesores puente”, es decir personas que conocen su tema y están preparadas en el lenguaje audiovisual, para la elaboración de sus materiales educativos. Y profesionistas que puedan ser intermediarios entre los responsables de los contenidos curriculares y los creativos del diseño.
